Nunca

Quizás nunca lleguemos a conocernos del todo. O quizás no estemos preparados para descubrirnos. Lo que está claro es que no podemos escapar de nosotros mismos. Hasta el día de nuestra muerte.

Allí me quedaré

Parecía mentira, pero no

Eras tú, otra vez.

Como quien no ha hecho nada

Como si el tiempo no pasara,

como si todo fuera una broma

Pero a mí, desde luego, no me hace gracia.

Y tal como llegaste, me fui

A donde no existieran tus promesas

y la esperanza no me dijera sí.

Allí me quedaré

Hasta que no duelan tus sonrisas

y tus saludos no me lleven al cielo.

Ahora

Necesito huir

desaparecer, vivir sin existir

Es posible, sé que se puede

lo hice, sin saberlo, hace tiempo

Y ahora, no logro retroceder.

Cicatrices

Hay cicatrices y cicatrices

Algunas duran toda la vida

otras desaparecen tras un tiempo

Y las otras son las que no se ven

solamente duelen.

Un lunes cualquiera.

Una decisión a tiempo

y el suspiro de un error pasado

En la esquina,

Conciencia y Arrepentimiento

hablando de Soledad.

Un lunes cualquiera.

 

Tiempo

No hay que ponerle buena cara

a todos los días malos

porque si hacemos eso

perderíamos el sentido del tiempo.

Dicen

Dicen que el tiempo todo lo cura y que pone a todo el mundo en su lugar, pero yo he visto heridas sin cerrar después de décadas y cicatrices que se vuelven cada vez más negras. He visto las flores más hermosas en una cuneta y a estúpidas obras de arte posmodernas adornando los salones más prestigiosos de la ciudad, la mayoría de ellas eran imitaciones.

Dicen que el tiempo hace, pero el tiempo en sí mismo es una acción, y lo que no se hace en su tiempo se queda sin hacer. Y respecto a lo que ya se ha hecho, ten presente que no se puede retroceder. Que he visto al olvido rendirse ante la evidencia y también he visto al perdón huir llorando de la conciencia.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Ya no existen aeropuertos

Estoy perdiendo facultades

y en los periódicos ya no sale tu nombre

ni tampoco en los sobres de azúcar

Tanto tiempo buscando nubes

y parece que ya no existen aeropuertos

Preguntas

Era uno de sus días raros de invierno, en los que cada recuerdo te atraviesa el presente en el momento menos oportuno y te nubla el futuro. Puede que simplemente fuera un día malo… o puede que llevara demasiado tiempo ignorando preguntas que ya debería haber respondido.

Así

Eran tiempos bonitos para el desorden: ni tú, ni yo, ni el resto. No había quien pusiera camino en nuestros pasos y, mucho menos, metas en nuestros sueños, principalmente porque no solíamos dormir. Andar sí andábamos mucho, pero siempre de aquí para allá y sin fijarnos en dónde poníamos los pies.

Así acabamos: ni tú, ni yo, ni el resto.